Cada octubre, los niños de todas las edades esperan celebrar Halloween con “truco o trato”, pero para los niños con alergias alimentarias y sus padres, las golosinas de Halloween pueden ser aterradoras. Los dulces y otras golosinas a menudo tienen alérgenos alimentarios comunes como ingrediente o tienen un riesgo de contaminación cruzada durante la producción.
Estos son algunos consejos para los padres con niños que tienen alergias alimentarias sobre cómo mantener a sus niños seguros mientras celebran el espíritu de Halloween:
- No permita que su niño se coma las golosinas hasta final de la noche, una vez que se hayan revisado todas las etiquetas de los alimentos.
- Evite que su niño coma cualquier golosina que no tenga una etiqueta que describa los ingredientes, como las golosinas caseras.
- Mantenga el autoinyector de epinefrina de su niño cerca.
- Eche un vistazo al proyecto de calabaza verde azulado. El proyecto de calabaza verde azulado tiene como objetivo crear conciencia y ofrecer opciones seguras a los niños con alergias alimentarias que piden dulces. Los participantes ubican una calabaza verde azulado fuera de su hogar o negocio para indicar que tienen golosinas seguras disponibles.
- Recuérdele a su niño que el “truco o el trato” es solo parte de la diversión de Halloween. ¿Una alternativa al “truco o trato”? Organice una fiesta de Halloween con golosinas, juegos y premios aptos para alérgicos.